martes, 18 de agosto de 2009

Mi Foto Favorita

Moneta Mi Moneta hermosa...

martes, 28 de julio de 2009

Llamas

lunes, 27 de julio de 2009

Mujeres migrantes, mujeres con derechos!

Las Bicicletas y Yo.

Tengo 20 años, y fue sólo hace aproximadamente un año que aprendí a pedalear sin rueditas de apoyo. Para la mayoría de los mortales suena como un chiste, pero para chiquillas o chiquillos ñoños como yo -ratones de biblioteca y/o nerds que nunca fueron muy fanáticos de la actividad física- suena una realidad mucho más cercana. Me crié en un barrio añejo, lleno de construcciones antiguas y abuelos. Los niños nunca abundaron, y menos las bicicletas. En mi casa recuerdo haber visto solamente una bicicleta; una que me trajo el viejo pascuero cuando tenía como 7 años, pero recuerdo haberla ocupado tan sólo una vez... cuando se le pinchó una rueda y en el patio terminó por oxidarse. Hace seis meses los hermanos chicos de mi novio quisieron sacarle las rueditas a su bicicleta, tal y como profesaba Freddy Turbina (el emblemático cantante de 31 minutos), y fue ahí como medio en broma me entro la curiosidad y las ganas de dejar de ser una ñoña de la que sus amigos se burlan porque no puede subirse a una bici... y despues de tres días de cientos de intentos fallidos y vergüenzas frente a los "cabros chicos" de la villa, en una pequeña pero mágica bajada logré mi equilibrio espiritual. Despues de ese memorable suceso, de ese gran hito en mi vida, de esa especie de "rito de paso" bicicletístico en mi cabeza todo el día sonaba Bycicle Race de Queen y con eso se desato una hecatombe en mi vida en la que las bicicletas fueron protagonistas. Las biciletas se transformaron en mi nueva obsesión... no tenía una y sentía que la necesitaba. Así fue como directamente desde el techo de la casa de mis abuelos bajó mi solución. Una Oxford de montaña oxidadísima. Pero extrañamente -¿o no tanto?- esta bici desaliñada no me satisfacia... quería algo más. El aprender a montar en bicicleta para mi fue simplemente LIBERTAD. El aire chocando en la cara, la velocidad, y el anexo de la música de felicidad que sonaba en mi cabeza eran una mezcla perfecta. Claro que lo mejor estaba por llegar. Un extraño día llegó a mi directamente desde una Fuente de Soda de mala muerte mi oxidada y azulosa Mini Cic. Una reliquia cayó en mis manos, ¡una belleza de fabricación chilena de los años 70' con la que soñaba hace meses! Todos los días veía pasar a un señor en esa bicileta y "tiernamente" lo psicopateaba, hasta que mi madre vio la bici estacionada por ahí y se la compró. ¡FELICIDAD! Una antigüedad más para mi colección, pero fue más que eso para mi... aunque para muchos suene raro, tonto e infantil la llegada de esa bici, el proceso de restauración y subirme a ella, andar por la ciudad con ella fue un pedacito de "alcanzar mi equilibrio espiritual", aire, magia, libertad, volver a ser niña.

domingo, 17 de mayo de 2009

Chau Número Tres - Mario Benedetti

Te dejo con tu vida tu trabajo tu gente con tus puestas de sol y tus amaneceres.
Sembrando tu confianza te dejo junto al mundo derrotando imposibles segura sin seguro.
Te dejo frente al mar descifrándote sola sin mi pregunta a ciegas sin mi respuesta rota.
Te dejo sin mis dudas pobres y malheridas sin mis inmadureces sin mi veteranía.
Pero tampoco creas a pie juntillas todo no creas nunca creas este falso abandono.
Estaré donde menos lo esperes por ejemplo en un árbol añoso de oscuros cabeceos.
Estaré en un lejano horizonte sin horas en la huella del tacto en tu sombra y mi sombra.
Estaré repartido en cuatro o cinco pibes de esos que vos mirás y enseguida te siguen.
Y ojalá pueda estar de tu sueño en la red esperando tus ojos y mirándote.
Chau Benedetti... hasta algún día.

viernes, 15 de mayo de 2009

Radiohead - All I Need

-Sin palabras-

sábado, 2 de mayo de 2009

Ando documentando

Por aquí y por allá hace años ando sacando fotos por todas partes, a muchas cosas, a muchos gatos, a mucha gente. A mi, a mi familia, a los espejos, a los reflejos, a los adornos, a otras fotos, a los animales, a las frutas, a los lugares. Probablemente haya comenzado a fotografiar por inercia, despues por costumbre, por gusto, y hoy lo hago por eso y porque ando documentando... claro está que también eso lo hago hace ya un par de años de manera inconsciente.
Me gustan las fotos, los objetos y las personas. Tengo una pequeña - gran obsesión con eso... y lo hago calladita. Ahora me escabullo por entre las multitudes de carnavales, mercados y ciudades con una cámara digital casera... y saco fotos porque sí, pero también con su qué. Me gusta la cercanía con la gente, los ángulos no comunes, el no planificar que la foto salga así o asá, pero a la vez también me gusta componerlas de una manera particular: no centrarla, que se enfoque mucho algo, pero que en el fondo, en el segundo plano se encuentre algo tanto o más interesante que a lo que estoy fotografiando. Pero creo que eso no es lo que más me importa cuando prendo la cámara y corro a sacar una foto. Lo que más me importa es el qué de mi foto, lo que significa en el momento justo que la tomo, o lo que va a significar... considerando que muchas veces no dimensiono totalmente el objeto, el sujeto, el lugar, el contexto... sólo fotografío por fotografias, por aprender, por investigar, por documentar. Ahora claro está -por lo menos para mí misma- que el aspecto documental de la fotografía no es lo más interesante, porque la fotografía -como todas las cosas- no es un objeto que se pueda "leer" o "re-leer" de manera objetiva y literal. La fotografía es un objeto de estudio particular, una posibilidad, una puerta hacia la realidad, pero a la realidad interpretada por uno mismo, y a su vez por otros. La fotografía es el reflejo de la otredad, de la diversidad... porque aunque nos fotografiemos a nosotros mismos, a nuestra propia cultura, o a una totalmente diferente, siempre podemos ver reflejada y/o interpretada la diferencia, lo nuevo, lo extraño, lo "exótico". En nosotros mismos está la real diferencia. Está en la interpetación o re-interpretación que hacemos de las imágenes, de las fotografías, de los documentos visuales, de sus contextos, de sus realidades, de sus manipulaciones visuales, sociales, culturales, políticas, geográficas. Interpretemos hoy las fotografías no sólo como un elemento documental, si no como una posibilidad a nuevas realidades, a nuevas ideas, a nuevos conceptos. No interpretemos "contexualmente" o "textualmente", interpretemos de manera consciente, libre, nueva, los colores, las composiciones, las otredades... el "alma" de la imágen. De: Lenina Barrios Atencio - Documentando